Los Servicios Médicos Municipales de Guadalajara han emitido un importante exhorto a la población, solicitando evitar la automedicación y el recurso a remedios caseros luego de sufrir una picadura de alacrán. Esta advertencia cobra especial relevancia durante las temporadas de altas temperaturas, principalmente en horarios vespertinos o nocturnos, cuando es más común el encuentro con estos arácnidos.
Se insta a la comunidad a extremar precauciones al examinar lugares propensos a albergar alacranes, tales como grietas, rejillas, pisos, ladrillos, hojas secas, piedras, maderas y tuberías. Para prevenir tales incidentes, se recomienda la colocación de mosquiteros en puertas y ventanas, así como la reparación de grietas en pisos, paredes y techos. Además, se aconseja mantener limpia y ordenada la vivienda y sus alrededores, evitando la acumulación de materiales de construcción, escombros o leña, ya que estos suelen ser lugares propicios para la presencia de alacranes.
Los síntomas de una picadura de alacrán pueden incluir dolor agudo, enrojecimiento y sensación de hormigueo. En casos de envenenamiento generalizado, pueden presentarse manifestaciones como taquicardia, dificultad respiratoria, salivación excesiva y temblores, entre otros. Ante una picadura, se recomienda aplicar hielo en la herida y acudir de inmediato a recibir atención médica, llevando, si es posible, al propio alacrán para su identificación.
Es fundamental no intentar extraer el veneno con la boca, ni aplicar soluciones o quemar la zona afectada. La automedicación tampoco es recomendable en estos casos. El personal médico determinará si es necesaria la aplicación del antídoto faboterápico antialacrán, por lo que se aconseja esperar su evaluación y seguir sus indicaciones.
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