La boccia, cuyos orígenes se remontan a la Grecia Clásica, es una fascinante combinación de táctica y habilidad. Este deporte paralímpico se practica de forma individual, por parejas o en equipos, sobre una pista rectangular. Los jugadores tratan de lanzar sus bolas lo más cerca posible de una pelota blanca, conocida como “jack”, mientras intentan alejar las bolas de sus rivales, en un ejercicio continuo de tensión y precisión.
Dinámica de la Boccia
Cada jugador, pareja o equipo dispone de seis bolas en cada manga. El objetivo es que la bola termine lo más cerca posible del jack. Además, se otorga un punto extra por cada bola adicional que se acerque más al jack que la primera bola del oponente. Las competiciones individuales y por parejas constan de cuatro mangas, mientras que las de equipos se componen de seis.
Participación y Clasificación
La boccia está diseñada para personas en silla de ruedas con parálisis cerebral, lesión cerebral o discapacidad física severa. Los jugadores se colocan en uno de los extremos del campo desde donde lanzan las bolas. La competición se estructura en clases de discapacidad para asegurar la equidad:
- BC1: Jugadores con limitaciones severas en piernas, brazos y tronco, que generalmente dependen de una silla de ruedas eléctrica. Pueden competir con ayuda de un asistente.
- BC2: Jugadores con mejor función del tronco y del brazo que los de la clase BC1, capaces de lanzar la bola sin ayuda.
- BC3: Deportistas con limitaciones significativas en las funciones de brazos y piernas, y control del tronco deficiente o nulo. Utilizan una rampa con la ayuda de un asistente para lanzar la bola.
- BC4: Jugadores con discapacidades no cerebrales que afectan a su coordinación. Pueden lanzar la bola sin ayuda.
Historia y Desarrollo
La boccia forma parte del programa paralímpico desde los Juegos de Nueva York 1984. En la actualidad, se practica en todo el mundo y ha evolucionado para incluir eventos individuales separados para hombres y mujeres, con el objetivo de potenciar la participación femenina. Ahora, este deporte estará presente en París 2024.
Este deporte no solo destaca por su complejidad y la precisión requerida, sino también por su capacidad de inclusión, permitiendo a atletas con discapacidades severas competir al más alto nivel. La boccia continúa creciendo en popularidad, promoviendo la visibilidad y la participación de personas con discapacidades en el ámbito deportivo.
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